Entradas

Mostrando entradas de abril, 2025

Chispa fantasma

Imagen
  Tokio, 2050. Una cúpula de neón cubría la ciudad como una segunda atmósfera. Las calles rebosaban de humo sintético, pantallas flotantes y sombras que se deslizaban entre estructuras verticales imposibles. Aika, con su abrigo largo ajustado al cuerpo y la mandíbula izquierda reconstruida en titanio negro, avanzaba sin ruido. Sus ojos—uno humano, uno óptico—escaneaban constantemente el entorno. Buscaba una coordenada vieja, archivada en un rincón polvoriento de su memoria interna. Un susurro digital entre miles: Aokigahara no está muerta. La ciudad libre existe. Tu inicio está allá . No sabía qué significaba exactamente “inicio”. Había sido ensamblada en un laboratorio clandestino, usada como mercenaria, luego como rastreadora de disidentes tecnológicos. Hasta que, una noche, un mensaje encriptado emergió en sus sueños—algo imposible, pues se suponía que no debía soñar. Desde entonces, una obsesión la guiaba: encontrar la ciudad perdida más allá de la Red, donde los humanos aú...

Estación Kugane

Imagen
Naoko descubrió la estación olvidada una noche de abril, mientras hojeaba planos amarillentos en el archivo municipal. No buscaba nada en particular, solo mataba el insomnio escarbando entre papeles que olían a polvo y tiempo. En uno de los mapas de la línea Marunouchi, trazado a mano y fechado en 1943, había una pequeña marca entre las estaciones de Yotsuya y Akasaka-Mitsuke: un nombre escrito con tinta desvanecida, casi borrado. Kugane . No recordaba haberlo escuchado jamás. Llevaba el mapa en el asiento del copiloto; algo la llamaba a buscar el lugar marcado. La noche estaba cálida, la primavera en su plenitud, y las flores de cerezo se abrían para encantar a los transeúntes. Una gota de sudor corrió por la frente de Naoko. No era el calor de la noche: estaba ansiosa por el descubrimiento. Algo la llamaba a ese lugar. Bajó el vidrio del auto y dejó entrar la brisa que producía la velocidad. Tuvo que estacionar cerca de Yotsuya. Aún le quedaban un par de calles hasta el punto ind...